Las entregas de reales despachos

Los reales despachos son los diplomas de fin de estudios (fin de carrera en el caso de los oficiales de la escala superior) de los oficiales y suboficiales de las Fuerzas Armadas, y las entregas de estos títulos son ceremonias tienen lugar en las academias militares de formación de oficiales y suboficiales.
Son actos muy importantes y de gran emotividad en la que los mandos dejan atrás su condición de alumnos para pasar a integrar las filas de los profesionales de los Ejércitos.
Las ceremonias están presidida por Su Majestad el Rey o Su Alteza Real el Príncipe de Asturias, acompañados normalmente por la Reina o, recientemente, la Princesa, respectivamente, y se celebran en la Academia General Militar de Zaragoza, la Escuela Naval Militar de Marín (Pontevedra), la Academia General del Aire de San Javier (Murcia), la Academia de General Básica de Suboficiales de Talarn (Lérida), la Academia Básica del Aire de La Virgen del Camino (León) y la Escuela de Suboficiales de la Armada de San Fernando (Cádiz).
Son actos que se ajustan a un protocolo específico pero que tienen una gran trascendencia dentro de la vida académica. Enmarcados, como siempre, en una parada militar, tienen una serie de componentes específicos:
- La entrega de despachos a los números uno de cada promoción, realizada por el Rey o el Príncipe personalmente, junto con una condecoración que premia su sobresaliente expediente académico.
- La entrega de los despachos al resto de la promoción a cargo de las principales autoridades civiles y militares presentes en el acto (presidente de la comunidad autónoma, ministro de Defensa, etc.).
- El último desfile de los nuevos oficiales y suboficiales en "su" academia.
- El último "rompan filas" a cargo del Rey o el Príncipe, con la ya tradicional fórmula de "Señores oficiales (o suboficiales, en su caso), por última vez en la academia, ¡rompan filas!".
- La copa de vino con familiares, en la que los Reyes o los Príncipes dedican una buena parte del tiempo a saludar y departir con "todos" los presentes.
Un acto emotivo que todos recordamos con cariño, y el premio final a un esfuerzo de varios años.