La Expo 2008 de Zaragoza se inauguró ayer

La familia real presenció ayer en pleno la apertura de la Expo, que Don Juan Carlos dio por inaugurada hacia las 21.30 horas.

Además de la familia real, estuvieron en la inauguración el presidente de la Comisión Europea, los presidentes de México y Portugal, Aníbal Cavaco Silva, y el jefe del Gobierno de Andorra; el primer ministro de Marruecos y el secretario general para Iberoamérica. Los presidentes del Congreso y del Senado, la del Tribunal Constitucional, y el del Consejo General del Poder Judicial.

El ejecutivo central estuvo representado por su presidente, acompañado por casi todo su gabinete. Los máximos responsables de siete comunidades autónomas -Asturias, Baleares, Canarias, Cantabria, Cataluña, La Rioja y Navarra- y de la ciudad autónoma de Ceuta arroparon a su homólogo aragonés, en este acto solemne.

A las 20.40 horas llegaron las autoridades, que fueron recibidas por el comisario de la Exposición, Emilio Fernández-Castaño, y el presidente de la Sociedad Estatal Expoagua, Roque Gistau. Los Reyes, que fueron recibidos con honores militares a su llegada al recinto de la Expo, firmaron en el libro de honor de la exposición internacional en el interior del Palacio de Congresos, donde se celebró la ceremonia inaugural.

Las intervenciones corrieron a cargo del comisario de la Expo, el alcalde de Zaragoza, el presidente de Aragón, el de la Oficina Internacional de Exposiciones (BIE), el presidente del Gobierno y el Rey, y a su término se procedió al izado de banderas del BIE y de España.

Una vez concluido este acto, Don Juan Carlos declaró oficialmente inaugurada la Expo y comenzó un espectáculo audiovisual al que proseguió una coreografía con niños de distintos países del mundo. A continuación, la actriz Belén Rueda realizó una reflexión del agua como "Valor y símbolo", a lo que siguió un espectáculo coreográfico sobre las relaciones placenteras que mantenemos con el agua en sus tres estados y la interpretación del himno de la Expo por la soprano Montserrat Martí.

Los invitados a la ceremonia disfrutaron de un cóctel-cena con platos típicos de Aragón y vinos de la tierra. Una hora más tarde, asistieron, en la Plaza Expo del recinto, a un espectáculo de fuegos artificiales.